¿PROSTITUCIÓN?

 (A una amiga)

Transitabas la calle, con tu rostro cansado
Una llovizna fría te besaba la piel.
Y en esa extraña fauna de seres apurados
mil rostros diferentes pasaban a tu lado
a quienes ofrecías tu cuerpo de alquiler.

Miradas de desprecio, comentarios airados
de las buenas señoras de nuestra sociedad.
Borrachos indigentes poetas o soldados
toda una amplia gama de seres lastimados
volcaban en tu pecho toda su soledad.

La noche te protege y no te discrimina
la noche que es testigo de todo tu dolor.
El faro de algún coche de pronto te ilumina
quizás hoy tengas suerte y abandones la esquina
y encuentres una cama y te mientas un amor.

Si te sonríe la suerte , quizás hoy sea tu día
o quizás solamente sea un coche policial
y acabes esta noche en la comisaría
humillada y vejada por cada policía
que hará de tu persona su juguete sexual.

Al fin a quién le importa si a nadie le interesa
eres carne en los hombres, desprecio en la mujer.
Eres esa muñeca ya rota y sin cabeza
que echada a la basura , recuerda con tristeza
el amor de una niña que ya no ha de volver.

Más bajo la pintura y esa ropa ajustada
Se esconde una muchacha que grita su dolor.
Y que aón en el fondo de su alma lastimada
donde la sociedad no dejó casi nada
se aferra ciegamente a un milagro de amor.

Un hogar con sus hijos, una mesa servida
el amor de un esposo que la sepa cuidar. 
El respeto del pueblo , el ser reconocida
las miradas amables, el honor y esa vida
que este perro destino le ha sabido negar.

Nuestro Dios perdonó a la Nubia pecadora
y sin juzgar sus actos le abrió su corazón.
Para que el ser humano venga a juzgar ahora
los pecados y acciones de una pobre señora
sin mirar hacia adentro en su propio corazón.

Le robamos su nombre y la llamamos ramera
hablamos de pecado infierno y perdición.
Y besamos por dinero las botas de cualquiera
y sin dudar nos vendemos por llenar la cartera
que alguien me diga que eso, no es prostitución.

Seguirás en la calle, en el mismo recorrido
para que esta asquerosa y corrupta sociedad
pueda sentirse buena, aún cuando ha cometido
los peores pecados que el mundo ha conocido
y se revuelca en su mierda , de pura falsedad.